Así es, han oído bien. Esta nación enclavada en el corazón del Caribe es capaz de ofrecer a sus turistas una visita a una isla diferente y exclusiva por cada día del año. Esta atracción de la naturaleza panameña responde al nombre de archipiélago de San Blas, también conocido por los nativos como de las Mulatas. Se trata de un conjunto de 365 pequeñas islas e islotes situados en la costa norte del país, al este del célebre Canal de Panamá.
La oferta turística de Panamá va mucho más allá de ser un importante centro de negocios internacional con magníficas conexiones comerciales con todo el planeta. Su riqueza natural tiene poco que envidiar a zonas tan conocidas y populares en términos turísticos como Maldivas. Dentro de las islas de San Blas el viajero encontrará sin ninguna dificultad genuinas estampas de postal y aguas de un intenso turquesa, así como playas de arenas blancas y brillantes.
Les recomendamos que pierdan tan solo un minuto de su navegación diaria por la red para que vean el nivel de “paraíso” al que nos estamos refiriendo en alguna fotografía. Un dato a tener en cuenta es que dentro de estas 365 islas, tan solo 80 están habitadas. Sus inquilinos son los indígenas Guna, un grupo perteneciente a la comarca de Guna Yala de la costa panameña. Una etnia conocida, entre otras muchas cosas, por su original arte decorativo sobre el propio cuerpo humano. Este pueblo, además de tener el privilegio de gozar de estas tierras, son también los encargados de su conservación y explotación turística.
Hagan cuentas con el dato que antes hemos señalado sobre las islas e islotes habitados. Esto deja 285 lugares distintos en los que poder vivir en primera persona esa fantasía tan recurrente de cualquier turista, ya sabéis: “si yo estuviera en una isla desierta para mí solo me llevaría…”.
Lo que sí aconsejamos es que os llevéis los móviles, tabletas y demás cacharros bien cargados porque si finalmente decidís sumergiros en el archipiélago de San Blas, enchufes, lo que se dice enchufes, no encontrarás demasiados. Otra cosa, además de todo bien cargado, también te recomendamos que lleves las tarjetas de memoria no muy cargadas porque os volveréis locos haciendo fotografías. La belleza del lugar es absolutamente arrebatadora.
Se trata de un destino bastante asequible para cualquier bolsillo, es decir, que no es necesario tener ninguna célebre cuenta offshore para poder disfrutar de las maravillas que ofrece San Blas y sus islas. Para llegar a este lugar se pueden tomar diferentes vuelos internos desde Ciudad de Panamá y lo recomendable es alojarse en hoteles fabricados con pencas al estilo de las viviendas tradicionales de los Gunas, en clara sintonía con el paisaje típico caribeño.
No hay comentarios